24 may 2012

Comidas modernas (el potaje no vale)

No os esperéis que hoy hablemos del bar Manolo, ni mucho menos...  Para ser un buen moderno además de los gustos musicales indie/pop/alternativo, de la afición por la tecnología vintage, de la ropa modernilla y de las gafas de sol permanentes, hay que ir a comer a sitios molones. Porque comer ya no sólo es alimentarse, también hay que alimentar el espíritu de la modernez.

Sésame: Mientras haya birra, yo me apunto, y es que no soy muy finolis con los sitios dónde comer. Mientras cumpla ese requisito indispensable, me adapto bastante. 
Cannelle: Si es que te conformas con bien poco
S: Pues sí, es lo que hay, una chica la mar de sencilla. 

Japonés 
No hay moderno que se precie que no vaya con asiduidad a comer a un japo. Hace unos años era rarísimo. Ahora todos comemos con palillos y conocemos el yakisoba, el sukiyaki, los edamames, el sushi, el sashimi y los makis. Somos unos expertos en la comida nipona, pedimos cerveza Kirin (bueno, eso sólo Sésame, que Cannelle es abstemia), nos endrogamos con wasabi y no dejamos pasar los postres rarunos.


La comida japonesa es la droga de los modernos, la culminación del espíritu de la globalización. Hagamos la prueba, parad a un chico camisacuadros-pantalónpitillo y preguntadle cuál es su tipo de comida favorita. Si no dice japonés y podéis demostrarlo, os invitaremos a unos makis.

Sésame: Ya veremos, si en el Primavera hay puestos de comida japonesa, entonces sí que podremos decir que es el fast-food preferido por los modernillos.

Cannelle: Recordad, si queréis ser modernos, japo, no chino.. chino no es moderno, chino es de viejales que van a llenarse la tripa de mala manera a un buffete tipo Wok. 

Tailandés 
Sésame: Un día fuí a un Tailandés y me encontré a Puyol
Cannelle: Que digas eso no es nada moderno, lo sabes, ¿no?
S: Ya, pero como no me pasan cosas interesantes tengo que recurrir a esos momentos de relación fugaz con un famoso para poder lucirme. 
C: ¿Pero te gustó la comida tailandesa?
S: Sí, sí, claro. Muy buena, pero había un tipo de carne que sabía como a jabón
C: ¿Pero has comido alguna vez jabón para ver a qué sabe?
S: No, pero lo he olido, y esa carne sabía igual que huele el jabón.
C:Ya...

Ninguno de estos es el plato que huele a jabón, pero sí que son platos tailandeses

Si es que todo lo asiático mola.

Restaurantes vintage
Y volvemos a decir que no nos referimos al bar Manolo. No, ni mucho menos, nos referimos a esos restaurantes que son vintage artificialmente. Como algunas hamburgueserías tipo años cincuenta que han surgido últimamente. Decoración de los años cincuenta, todo muy roquero y muy vintage americano pero made in Taiwan.



Señores de las hamburgueserías cincuenteras, sus batidos (a la par que calóricos) son rebuenos, pero el sky se deshechó para tapizar sillas y sofás porque se pega en las piernas, es anti transpirable y hace que te sude el culo. Y en esas circunstancias, uno no disfruta de su comida como debiera.


Pastelerías modernas
De esto, las dos que os escriben saben bien poco.
Una porque aunque pueda parecer increíble, no le gusta nada el dulce, ni siquiera el chocolate y la otra porque tiene problemas con el azúcar y más le vale no acercarse a menos de cien metros de cualquier pastelería.


Pero nos han dicho que hay pastelerías modernas, en las que puedes comer cupcakes (que no magdlenas), tomar un café o un té en tazas hipermolonas, comer pasteles de zanahoria y canela y ver cómo otros modernos y modernas, ganchillean, escriben en su blog con su Mac, dibujan en su Moleskine o leen poemas de Bukowski, además de ver a bloggers de moda cotilleando la Cuore y criticando los outfits de todos los presentes en dicha pastelería.



El tema es que todo lo que suene a exótico, lejano y raruno, mola. Mola decir que vas a un tailandés-koreano en el que comes hígado de buey macerado en vino de bayas del desierto y de postre cupcakes. Porque sí, porque es moderno y te hace parecer más leído y más viajado.



8 comentarios:

  1. pues yo...la verdad es q no he sucumbido a los japos, aunque sí que me gusta conocer comidas del mundo. Eso sí, una ya se va conociendo y sabe de antemano qué cosas no le sientan bien, por muy bonito que lo pinten... Sinceramente, prefiero un bar de tapitas andaluz ¡ es lo que tiene! bueno y barato!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que las tapaaaas... son las tapaaaas... nosotras unos boqueroncitos, unas bravas, unos chocos, un pincho de tortilla, no lo cambiamos! Besos Inma!

      Eliminar
  2. Eso sí, a mi me indigna mucho la comida de los modernos. ¿Qué pasa, que los modernos no pueden ser diabéticos ni tener colesterol ni nada por el estilo? Ya se podrían poner de moda las acelgas...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Indignadas estamos Laia! no, los modernos son perfectos, no lo sabes?

      Eliminar
  3. Woooo! Me siento muy moderna de repente, mi madre una vez cada dos semanas nos enseñaba nuevos platos asiáticos… eramos de los que experimentábamos siempre nuevos sabores (mi madre siempre al margen). Pero ahora mismo os digo que por unos buenos Pintxos MA-TO. En el norte no tenemos tapas (una pena) pero las barras de pintxos en los Bares son espectaculares. Por cierto, para vegetarianos cada vez hay más cosas y restaurantes muy pero que muy modernitos Laia y a este paso saldrán más, ahora se demanda cada vez más gastronomía verde. A mí me encanta....!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Vaya madre moderna!
      Queremos conocerla!!!! fotos de mamá-maïder ya!
      Y Maïder... no te quejes por las tapas, que los pintxos son la leche!!!!!

      Eliminar
  4. Yo no sé que será lo próximo....Esperamos estar a la altura y ser modernas jaja

    http://0001deasdeocio.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Doli, para mañana tenemos una sorpresita, pero no es comida moderna, ya te avisamos... mmm... se acerca pero no es...

      Eliminar